El electorado salvadoreño está convocado a renovar la Asamblea Legislativa (parlamento local) y las alcaldías con la irrupción como partido político de Nuevas Ideas, del presidente Nayib Bukele.
Las elecciones tendrán lugar en medio de tensiones políticas las cuales han estado enfrentados el presidente Nayib Bukele, electo en 2019, y el saliente parlamento (cuya composición data de un año antes) de mayoría opositora dominado por la ultraderechista Alianza Nacionalista Republicana (ARENA) e integrado, además, por el izquierdista Frente Farabuno Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y cerca de una decena de pequeños partidos más.
Bukele, como parte de su campaña de elección y en particular tras haber ganado la presidencia en 2019, organizó su partido Nuevas Ideas con el cual pretende, según anunció, "acabar con el bipartidismo" de ARENA y FMLN, a pesar que él mismo se sirvió del aparato electoral de este último, por el cual llegó a ocupar la alcaldía de la capital, San Salvador.
Durante estos dos años de gobierno, Bukele ha estado enfrentado con la Asamblea Legislativa, a la cual acusa de "obstruir sus esfuerzos por gobernar" y el conflicto ha vivido distintos episodios a lo largo de 2019 y 2020, incluso en medio de la pandemia de Covid-19 y tuvo un momento álgido el 9 de febrero de 2020, cuando el presidente militarizó la sede del legislativo en un intento por forzar la aprobación de presupuesto para su plan de control militar.
¿Fortalecimiento de poder?
Dichas elecciones podrían marcar la consolidación en el poder del mandatario si logra alcanzar una mayoría legislativa con sus partidos aliados Nuevas Ideas (NI), que ayudó a formar, y Gran Alianza Nacional (Gana), que le postuló a la presidencia.
Se percibe que están en juego los dos extremos: que el presidente controle el legislativo con una mayoría de NI y Gana; o que Arena y el FMLN mantengan la mayoría de escaños.
Con control del legislativo, Bukele podrá incidir en los nombramientos en la Corte Suprema de Justicia, la Contraloría y la Fiscalía, con las cuales ha tenido disputas, así como promover reformas constitucionales de su interés.
La gran mayoría de los sondeos señalan que Nuevas Ideas, el partido del mandatario, presidido por su primo Xavier Zablah Bukele, obtendría los dos tercios de los escaños, una mayoría que le permitiría elegir funcionarios a conveniencia y realizar reformas a la Constitución.
Por ende las elecciones legislativas y municipales de hoy 28 de febrero serán cruciales para la democracia de El Salvador, ya que pueden servir al presidente Nayib Bukele para consolidar su “giro autoritario”.
Aunque él no aparece en la papeleta electoral, su imagen e influencia han sido cruciales para posicionar a su partido, Nuevas Ideas, como el favorito en las encuestas. Con un perfil moderno en redes sociales y una estrategia política agresiva, Bukele y su Gobierno han mermado el estado de derecho y los contrapesos democráticos.